El «Mal de Africa»
16/08/2016
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Africa siempre hechiza y sorprende a pesar de sus trágicas y mágicas contradicciones.
Agujeros de luz que perfilan la belleza de un continente que conquista tus sentidos.
Otra vez afectada por el «Mal de Africa»…
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| Sukala, país Lobi. Burkina Faso, 2016 |
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| Hechicero Vudú, Detohou. Benin 2016 |
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| Tiebelé. País Gurunsi, Burkina Faso, 2016 |
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| Sukala, país Lobi. Burkina Faso, 2016 |
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| Tata somba, Benin, 2016 |
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| Tata sombas, Benin 2016 |
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País Lobi. Burkina Faso, 2016
 Tribu Mossi, Burkina Faso, 2016  País Lobi, Burkina Faso, 2016 |
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| País Lobi. Burkina Faso, 2016 |
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| País Lobi. Burkina Faso, 2016
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Nostálgica luz que irradia el rostro de miradas profundas, entre sombras buscas el espíritu del habitante africano, te enamora de esa realidad, a tu regreso a occidente te aqueja el “Mal del África” un mal romántico, poético, quizá filosófico cuando Platón considera que el amor es la motivación o impulso que nos lleva a intentar conocer y contemplar la belleza.
Un estado sintomático que afecta a los viajeros comprometidos con su gente, con su cultura, con sus colores, con sus ritos, con su gastronomía, con su situación económica y manera de vivir. En un breve resumen del libro de Eduardo Garrigues, “El mal de África” que circula por Internet se refiere a: “cazadores, bellas y misteriosas mujeres, magia, tradiciones milenarias, ídolos malditos, fenómenos inexplicables, triángulos amorosos y traiciones pasionales y fatales destinos”, pero, tu mirada acertada elige la luz que irrumpe la intimidad de su gente que habita en casa de barro, que cocina con leña y cuyo humo ayuda a la estética de esa misteriosa atmósfera rural en Burkina Faso y Benin. Bien por esas fotos étnicas.
Humberto Berrezueta Durán.
Gracias amigo Humberto por dedicarme tu tiempo, pero sobre todo por tu mirada atenta y como ya te han dicho: "Por tu talentosa habilidad para que las palabras conmuevan". Como dice Kapuscinski, lo que podríamos llamar contagio de viaje, es en el fondo una enfermedad incurable…